
Rafael Martín Moyano
Madrid, 1941
Rafael Martín Moyano es un ingeniero que ya frisa en los ochenta y que asegura haber pasado su vida aprendiendo y escribiendo, aunque la gran mayoría de estos escritos sean de carácter profesional. Tras su jubilación, una vez liberada su pluma de las obligaciones y compromisos laborales, ha sentido la tentación de ponerla al servicio de otros temas que le son cercanos y en los que ha creído que podía aportar algo de interés. Hasta ahora le ha dedicado horas al pedernal de la muralla de su querido Madrid y a la estancia de Cela en Hoyo de Manzanares, su segundo pueblo, que él considera transcendente para la brillante carrera del Nobel.